Dos adolescentes de Iowa (EE.UU) mataron a su maestra de español el año pasado debido a la frustración por una mala calificación, dijeron los fiscales el martes en documentos judiciales que por primera vez revelan un posible motivo del asesinato.
Willard Miller y Jeremy Goodale fueron arrestados y acusados del asesinato de su maestra Nohema Graber, de 66 años, en el pequeño pueblo de Fairfield el 2 de noviembre de 2021. El cuerpo de Graber fue encontrado al día siguiente, oculto bajo una lona en unos rieles de ferrocarril en un parque de Fairfield. Había sido golpeada hasta la muerte con un bate de béisbol.
Los documentos fueron presentados antes de una audiencia del miércoles en la que un juez escuchará los argumentos sobre si se debe suprimir algunas de las pruebas en contra de Miller y Goodale. De hecho, una de las abogadas de Miller ha solicitado a la corte que invalide cuatro órdenes de registro y suprima evidencia de la casa del joven, los comentarios que hizo a la policía y la información tomada de su teléfono celular y de la plataforma de redes sociales Snapchat el día del crimen, ya que los -en ese entonces menores-se jactaron del asesinato en esa red social.
Los investigadores descubrieron que Miller se reunió con la maestra en la escuela secundaria de Fairfield la tarde del 2 de noviembre de 2021 para discutir sus malas notas en clase. Más tarde, Graber condujo su camioneta hasta un parque en el que se sabía que tomaba una caminata diaria después de la escuela, afirman las autoridades.
Los testigos vieron a dos varones en el asiento delantero de la camioneta de la maestra cuando se alejaba del parque menos de una hora después. Luego, ambos acusados abandonaron el coche en un camino rural y siguieron a pie.
En un interrogatorio policial, Miller describió la frustración que tenía con la forma en que Graber enseñaba español y sobre cómo la calificación en su clase estaba bajando su promedio.
“Se cree que la mala calificación es el motivo detrás del asesinato de Graber, que conecta directamente a Miller”, indican los documentos judiciales entregados a las autoridades por el fiscal del condado de Jefferson, Chauncey Moulding, y el fiscal general adjunto de Iowa, Scott Brown. En un principio, Miller negó cualquier implicación en la desaparición de Graber, pero “más tarde declaró que tenía conocimiento de todo, pero que no participó”.
El juicio de Miller está programado para el 20 de marzo en la ciudad de Council Bluffs y el de Goodale para el 5 de diciembre, en Davenport.
Ambos adolescentes, que ahora tienen 17 años, serán juzgados como adultos. En Iowa, la pena por una condena de asesinato premeditado es de cadena perpetua. Las normas de la Corte Suprema de Iowa exigen que los menores condenados incluso por los delitos más graves tengan la oportunidad de obtener libertad condicional.