Por Eloy Alberto Tejera
El huracán Fiona dejó, además de una estela de daños considerables en República Dominicana, una serie de hechos que provocaron, en unos la risa, y en otros la indignación debido al protagonismo en que se vieron envueltos algunos políticos.
Desde el flanco oficialista hasta miembros de la oposición, lo cierto es que como siempre, algunos quisieron capitalizar el dolor y la tragedia del prójimo, y otros actuaron de manera poco recomendable, o que para los internautas no estaban a la altura de los acontecimientos.
En esa tesitura, el ex presidente Leonel Fernández fue el primero en llevarse un aluvión de críticas al filtrarse un video donde aparecía bailando en una actividad pública, mientras el país enfrentaba un fuerte huracán, el cual se avecinaba al país.
Alzando las manos, y moviendo la cintura con poca gracia el ex presidente Fernández debida a esta acción recibió una tremenda tunda en las siempre ardientes redes sociales, quienes calificaron el hecho de insensible, y sobre de todo tacto o de sentido común.
Otro que enfrentó duras críticas, y las redes fueron implacables con él, fue el diputado del Partido Revolucionario Moderno (PRM), Elías Báez, pues publicó en sus redes sociales que iba a ofrecer ayuda a ciudadanos de Higuey mientras mostraba dinero, una pistola y una botella de agua.
Las redes sociales estallaron de ira contra el diputado, quien finalmente pidió disculpas.
Posteriormente el congresista se vio precisamente a pedir unas disculpas que no tienen gran repercusión, pues “ya el palo estaba dado”.
Otro que cayó en las críticas de las redes sociales, fue el presidente del Partido Revolucionario Moderno, José Ignacio Paliza, quien apareció cargando un saco que sería distribuido entre personas de escasos recursos.
Al igual que hicieron con el diputado Báez, en las redes se acabó con él y llovieron las críticas.
Uno que tuvo mejor suerte, fue el presidente de la República, Luis Abinader, quien ha estado de manera muy activa en el Este del país, llevando soluciones y percatándose de primera mano sobre los desastres ocasionados por Fiona a su paso por el país.
Como, se ve, una cosa es con huracán y otra con violín, cuando se trata del accionar de los políticos, quienes viven de la imagen pública, y quienes no desaprovechan ningún momento para poner la mejor cara a las cámaras o sacar el mejor rédito político de las situaciones más calamitosas.
Eloy Tejera/Director Ejecutivo