“Nos encaminamos a convertirnos en una verdadera potencia regional en términos de capacidad de generación eléctrica moderna y diversificada. ESTO ES CAMBIO”.
El presidente Luis Abinader, en su discurso de Santiago con motivo del Día de la Restauración de la República, destacó los logros que su gobierno ha tenido en el campo energético y de esa manera reconoce la gestión del ministro de Energía y Minas Antonio Almonte, que además de estar al frente de esa institución, ser constante exponente de los planes de gobierno, ha tomado iniciativas que proyectan una solución definitiva al grave problema energético heredado.
Dentro de su retórica el presidente expresó que en materia energética, un sector que durante décadas había sido abandonado de la planificación y solo utilizado para el beneficio de unos pocos, desde el gobierno hemos planteado una política clara para satisfacer las demandas actuales y que no nos lleve a comprometer el crecimiento futuro de nuestro país.
“En cuanto a la generación eléctrica hemos autorizado la mayor expansión de energías renovables de nuestra historia, con un aumento de 692 nuevos MW distribuidos en 12 proyectos en diferentes regiones del país, de los cuales unos 250 MW están ya en operación y el resto se estima que estarán en línea a finales del 2023. En resumen, hemos otorgado concesiones y contratos para la construcción de instalaciones de electricidad solar fotovoltaica por una capacidad cuatro veces mayor que los apenas 162 MW encontrados en agosto del 2020.” Dijo.
Abinader señaló que, “para asegurar el abastecimiento presente y futuro de energía eléctrica hemos realizado dos licitaciones y tenemos una tercera en proceso: Una de las licitaciones fue de urgencia, de 400 MW que estará generando a partir de septiembre de este año y la segunda es de 800 MW en Manzanillo, Montecristi e incluye la construcción de la primera terminal de almacenamiento y distribución de gas natural en la región norte del país”.
Añadió que la que se encuentra en proceso de licitación añadirá cuando se culmine otros 800 MW más a la red. “En suma, en pocos años el país contara con 2,000 nuevos MW de potencia firme aparte los MW de las renovables solar, eólica, biomasa e hidráulica. Nos encaminamos a convertirnos en una verdadera potencia regional en términos de capacidad de generación eléctrica moderna y diversificada. ESTO ES CAMBIO”, proclamó.
“Con estas inversiones cubriremos el aumento de la demanda por el crecimiento de la economía de alrededor del 5% anual. Tendremos también por primera vez en nuestra historia una oferta de generación eléctrica para 2025 muy superior a la demanda máxima anual para poder disponer de la llamada “reserva fría” del sistema como ocurre en todos los países con sistemas eléctricos bien dimensionados y seguros, dijo y agregó que “esa reserva fría será en principios cercana a los 700 MW”.
Hablando de las dificultades eléctricas y la repuesta que ha dado su gobierno, el mandatario narró que “un problema que llevaba más de 20 años sin ser abordado de manera responsable y planificada es la situación de las redes e infraestructura general de distribución eléctrica”. “En el pasado se invirtieron miles de millones de pesos en la compra de medidores y transformadores, de redes, cables y accesorios, pero no hay constancia de que la mayor parte de tales materiales y equipos hayan entrado a los inventarios de las empresas, razón por la cual ya hay una investigación a cargo del Ministerio Público sobre las gestiones pasadas de las distribuidoras”.
En cuanto a la inversión monetaria dijo que para resolver de una vez por todas esa extrema fragilidad del sistema de distribución se necesita una inversión de aproximadamente 1,200 millones de dólares en un periodo de dos años.
En ese sentido Abinader señaló que, ese plan de inversión estaba previsto iniciar en este 2022, pero la brusca y sostenida alza de los precios de los combustibles de generación eléctrica, agravada además por la guerra entre Rusia y Ucrania, elevaron los precios de la energía y aumentaron a niveles sin precedentes el déficit entre compra y venta de energía de las empresas distribuidoras, lo que obligará al gobierno a destinar cerca de 700 millones de dólares adicionales a lo largo de este año para absorber el alza del precio de la energía y proteger a la población y a las pequeñas y medianas empresas.
“Frente a esa nueva realidad nuestro gobierno ha replanteado la estrategia de inversión en las distribuidoras y se pondrá en marcha un plan de compra de 300,000 medidores eléctricos, así como una gran cantidad de transformadores de potencia y de distribución, además de redes, y otros equipos y accesorios”, informó el presidente.