Santo Domingo, RD.- Cada vez que llueve en la capital, queda demostrado lo deficiente y desfasado que se encuentra el sistema de drenaje pluvial. Ayer en Santo Domingo se produjo un fuerte aguacero, y alrededor del Parque Independencia, calles y aceras estaban completamente anegadas.
En la gráfica que acompaña a este texto puede observarse cómo se formaron, varios minutos después de empezar la lluvia, grandes charcos y corrientes de ríos, que impedían el tránsito de las personas.
Un vendedor de empanadas, pese al aguacero, permanecía tranquilo e impertérrito al lado de su triciclo. Al fondo un niño jugaba con un palo, y lo introducía de vez en cuando en el gran charco que se formaba.
Fue alrededor de las 6:30 p.m. que la lluvia cesó y que las personas que se encontraban resguardas en negocios, como la óptica que está frente al Parque Independencia, empezaron a salir y a dirigirse a sus lugares de destino.
Escenas como éstas deben obligar a las autoridades a solucionar este grave problema que se padece desde hace décadas, máxime si toman en cuenta de que esta es una zona turística, y la misma es visitada y frecuentada por estos de manera permanente.