La fusión de 2.200 millones de dólares fue con Penguin Random House, la editorial más grande del país
El éxitoso autor Stephen King se sentó cautelosamente en el banquillo de los testigos en un juicio federal antimonopolio el martes. Recordando su propia historia, presentó un retrato de una industria editorial que se ha vuelto cada vez más concentrada a lo largo de los años, mientras recompensa generosamente sus esfuerzos creativos.
“Mi nombre es Stephen King. Soy un escritor independiente”, dijo al comenzar su declaración como testigo del Departamento de Justicia de Estados Unidos. El gobierno intenta convencer a un juez federal de que la fusión propuesta de Penguin Random House y su rival Simon & Schuster, dos de las editoriales más grandes del mundo, frustraría la competencia y afectaría las carreras de algunos de los escritores más populares.
King ha sido publicado durante años por Simon & Schuster. Algunas de sus antiguas editoriales fueron adquiridas por otras más grandes. La fusión de 2.200 millones de dólares de Penguin Random House, la editorial más grande del país, y Simon & Schuster, la cuarta, reduciría las llamadas “Cinco Grandes” (Pengin Random House, Simon & Schuster, HarperCollins Publishing, Macmillan y Hachette) a cuatro.